Cayo Levantado Resort: donde el Caribe se viste de lujo

La experiencia de Cayo Levantado empieza desde el momento en que llegas al muelle privado que el hotel tiene junto a la bahía de Samaná y disfrutas de tu copa de bienvenida. Tomas el barco y frente a ti vas vislumbrando una maravillosa playa de arena blanca y la silueta elegante de un resort que pronto comprobarás no tiene nada que ver con la imagen del típico hotel all-inclusive del Caribe.

Tras una renovación integral en 2023, el Cayo Levantado Resort se posiciona como un destino exclusivo que armoniza la sofisticación con la preservación del entorno natural. Su propuesta va más allá de la simple hospitalidad, integrando experiencias inmersivas que fusionan el bienestar, la gastronomía y la sostenibilidad en un entorno paradisiaco. Un lujo que resulta difícil de describir con palabras.

Así es Cayo Levantado Resort

Con 218 suites y villas de diseño contemporáneo, el resort ofrece diversas opciones de alojamiento pensadas para adaptarse a diferentes estilos de estancia. Las Junior Suites, por ejemplo, combinan amplitud y confort, con vistas panorámicas al mar o acceso directo a jardines exuberantes. Para quienes buscan un extra de exclusividad, las suites con piscina privada permiten disfrutar de un entorno más íntimo y personalizado.

Por otro lado, las villas de uno y dos dormitorios ofrecen una experiencia aún más exclusiva, con espacios independientes, terrazas privadas y piscinas de inmersión rodeadas de naturaleza. Estas opciones son ideales para quienes desean un retiro tranquilo sin renunciar a las comodidades de un resort de lujo. Finalmente, la Cayo Levantado Signature Villa, la joya de la colección, redefine la estancia premium con un servicio personalizado, vistas privilegiadas y áreas diseñadas para una experiencia de bienestar total.

Cada habitación está equipada con tecnología de punta, WiFi de alta velocidad y sistemas de entretenimiento avanzados. La selección gourmet del minibar, que está incluido en la reserva, incorpora rones locales, promoviendo la identidad gastronómica de la región.

Los interiores destacan por el uso de materiales nobles como la madera, piedra coralina y fibras naturales, que evocan la esencia caribeña con un toque sofisticado. Los colores cálidos y neutros se combinan con detalles coloridos inspirados en la flora y fauna local, mientras que las obras de arte y elementos decorativos reflejan la herencia cultural de la región, incluyendo referencias a la tradición taína.

Las áreas comunes del resort incluyen espacios de descanso al aire libre, diversas piscinas adaptadas a distintos tipos de experiencias y terrazas panorámicas ideales para disfrutar de los atardeceres dominicanos. Entre ellas, destacan las infinity pool con vistas impresionantes a la bahía de Samaná, que ofrecen un entorno perfecto para la desconexión total.

Para quienes buscan una experiencia refrescante y relajante, la piscina central se convierte en el epicentro social del resort, rodeada de tumbonas, camas balinesas y servicio de coctelería y restaurante.

El Cayo Levantado Resort ofrece a sus huéspedes dos impresionantes playas de arena blanca. Una de ellas es una playa privada exclusiva para los huéspedes del resort, donde pueden disfrutar de un ambiente tranquilo y servicios personalizados. La otra es una playa pública, conocida como “Playa Bacardí”, que está abierta tanto a visitantes locales como a turistas. Esta playa pública es famosa por su belleza escénica y es un popular destino de excursión especialmente animado durante las mañanas y más tranquilo cuando cae la tarde.  

Bienestar y salud integral: El concepto de Yubarta

El resort alberga Yubarta, un centro holístico, estructurado en torno a los "4 Caminos del Bienestar": Refresh, Restore, Relax y Renew. Esta propuesta innovadora integra terapias holísticas, hidroterapia con baños de hielo, sesiones de meditación guiada y yoga, además de un spa con tratamientos personalizados que favorecen la regeneración física y mental.

También encontramos en el hotel un coqueto spa, que ofrece una amplia gama de masajes terapéuticos, aromaterapia y tratamientos de hidroterapia con agua de manantiales locales. Además, cuenta con programas de desintoxicación, ayuno intermitente guiado y nutrición personalizada para quienes buscan una experiencia de bienestar integral.

Para los huéspedes que buscan actividad física, el resort incorpora un estudio de entrenamiento personal equipado con tecnología de vanguardia. Con opciones de entrenamiento personal y sesiones todas las mañanas de pilates y otras actividades deportivas.

Gastronomía: Un viaje sensorial

La propuesta culinaria del hotel es una invitación a un viaje gastronómico donde la diversidad y la innovación juegan un papel clave. Cada restaurante dentro del resort ofrece una identidad propia, resaltando distintas influencias y estilos culinarios, perteneciendo la mayoría de ellos a la oferta all-inclusive.

El principal referente de la cocina dominicana en el resort es Palma Real, donde la gastronomía autóctona es reinterpretada con un enfoque contemporáneo. Aquí, los ingredientes locales cobran protagonismo, transformados en platos que exaltan la riqueza de la tradición caribeña con una presentación sofisticada y técnicas modernas de cocina.

Para quienes buscan una experiencia más exclusiva y experimental, Carey ofrece un ambiente íntimo con menús que varían según la temporada. Su concepto fusiona influencias globales con productos locales, presentando combinaciones de sabores sorprendentes y una estética gastronómica de alto nivel.

Senda, por otro lado, pone énfasis en los productos del mar, destacando la frescura de sus ingredientes y técnicas innovadoras de cocción. Los mariscos y pescados se preparan con un respeto absoluto por su sabor original, potenciados con hierbas y especias del propio huerto del resort.

Santa Yuca se convierte en el epicentro de la coctelería y el maridaje. Su enfoque está en la exploración de combinaciones inesperadas de sabores, donde la selección de vinos y cócteles artesanales diseñados por mixólogos expertos complementan a la perfección una carta de platos innovadores.

Finalmente, Manaya es un templo para los amantes de la carne y uno de los espacios más bonitos y exclusivos del resort. Especializado en cortes premium, su propuesta se centra en la calidad y la cocción precisa, con parrillas al aire libre que realzan el sabor de cada pieza.

Comprometido con la sostenibilidad, el resort mantiene un huerto orgánico, garantizando la frescura y trazabilidad de sus productos. Además, los huéspedes pueden sumergirse en la cultura culinaria local a través de talleres dirigidos por chefs reconocidos, quienes comparten técnicas tradicionales y la historia detrás de los ingredientes dominicanos.

Samaná: descubriendo el Caribe que siempre habíamos soñado

Samaná refleja a la perfección todo lo que uno puede imaginar del Caribe. De ese Caribe que posiblemente ya no es tan fácil de encontrar en otras islas o, incluso, en otras partes de República Dominicana.

Descubrir.comChristian Rojo

Una clara apuesta por la sostenibilidad

Más allá del lujo, el Cayo Levantado Resort se erige como un modelo de desarrollo turístico sostenible. Mediante la Fundación Eco-Bahía, los huéspedes pueden participar en programas de conservación, reforestación y educación ambiental, fortaleciendo la conciencia ecológica y la integración con la comunidad local.

El resort trabaja en colaboración con organizaciones locales para la protección de especies marinas y la regeneración de arrecifes de coral. También promueve iniciativas de energía renovable, reducción de residuos plásticos y programas de reciclaje para minimizar su impacto ambiental.

Una de sus innovaciones más destacadas es su sistema de recogida de agua de la humedad ambiental, que permite captar y purificar la humedad del aire para transformarla en agua potable. Este sistema de vanguardia no solo contribuye a la autosuficiencia hídrica del resort, sino que también reduce la dependencia de fuentes de agua externas, minimizando así la huella ecológica de la isla.

Samaná: Una ubicación privilegiada

La península de Samaná es un destino de alto valor ecológico, con playas de arena blanca, ecosistemas costeros y una biodiversidad excepcional. Su riqueza natural lo convierte en un lugar ideal para quienes buscan una combinación entre descanso y exploración activa.

Entre las actividades imperdibles destaca el avistamiento de ballenas jorobadas, un fenómeno natural que ocurre entre enero y marzo, cuando estos cetáceos migran a la bahía para reproducirse y criar a sus ballenatos. Desde embarcaciones diseñadas para garantizar la menor alteración del hábitat marino, los visitantes pueden maravillarse con los saltos y comportamientos de estas impresionantes criaturas en su entorno natural.